Utilizar el servicio de trastero o guardamuebles en una mudanza puede resultar imprescindible en el momento que no tenemos todavía disponible el nuevo piso, eso sucede con mucha frecuencia, bien por el retraso en la firma de la compra o del contrato de alquiler, o adecuación por obras de la nueva vivienda.
La alternativa es depositar los enseres personales en un trastero o guardamuebles. Trasteros podemos encontrar de diferentes tamaños, pero lo habitual suele ser de 20m3 a 40m3. Normalmente, para un piso de 1 o 2 habitaciones, y que conviven 1 o 2 personas, con 20m3 suele ser suficiente, para un piso de 2, 3 o 4 habitaciones, y de 2 a 4 convivientes será necesario 40m3.
Utilizar el servicio de trastero o guardamuebles en una mudanza suele ser flexibles, de manera que podemos adaptar al número de meses que necesitamos disponer de ellos, dejándolo en el momento que consideremos oportuno con un preaviso de 15/20 días de antelación. Pagaremos una fianza al empezar, que nos será devuelta al finalizar, y luego una cuota mensual.
Es importante, que el trastero este lo más cerca posible de ambas viviendas; las de origen y destino, ya que tendremos que hacer dos viajes, uno para depositar los enseres y otro llevárnoslos. ¡Cuidado!, a veces, hay mucha diferencia de precios por pocos quilómetros que nos alejemos de grandes ciudades. También, es importante, leer la letra pequeña de las promociones que se ofrecen.
Tiene la opción de contratar un trastero, y realizar la mudanza por sus tus medios, pero le recomendamos, que antes nos contactes sin ningún tipo de compromiso para asesorarte de forma gratuita.